Imagen generica
¿Aún no estás registrado?
Regístrate ahora, son 2 minutos

LA CREATIVIDAD Y LA FELICIDAD: LA CHISPA QUE ACTIVA NUESTRO CAMBIO EDUCATIVO.

ESMERALDA guillen

Publicado el 19/06/2017 11:06

Nos encontramos ante un punto de inflexión educativa en el que es necesario el renacer metódico, la adaptación técnica y el acompañamiento de alumnos hacia un mundo tecnológico y virtual donde el conocimiento se encuentra en nuestras manos en lugar de en nuestros cerebros.

El rendimiento académico de nuestros alumnos constituye un factor imprescindible al abordar el campo de la calidad de la educación primaria, pero ¿es suficiente un buen rendimiento académico si nos olvidamos de contribuir al desarrollo personal, social y profesional de los estudiantes?

Es palpable el interés que se ha generado en nuestra sociedad por los movimientos educativos en todas las escalas, por las adaptaciones que realizamos en las aulas para acercarnos al mundo en el que nuestros alumnos crecen. Sin embargo, la pregunta es ¿estamos bien preparados para ello? ¿estamos contando con sus intereses y necesidades para poder transmitirles aquellos conocimientos que van a servirles de utilidad a lo largo de los años de su preparación para la vida adulta?

cambio educativoConstantemente el profesorado se renueva para ser los mejores y llegar a nuestro objetivo final, la formación de alumnos competentes en varias disciplinas, no obstante no todos los educandos llegan a transmitir y a comunicar todo aquello que se proponen. Necesitamos algo más, algo innovador, algo que nos ayude a mejorar el sistema educativo como parte de una comunidad. Eso es conocido como la motivación. La motivación es un empuje, es una fuerza que te llena de propósito para alcanzar metas definidas.

Con este artículo pretendo ir más allá. Quiero valorar opciones que motivan al alumno sin darnos cuenta ni como padres ni como profesores, pero sí como personas; la creatividad y la felicidad. ¿Quién no se mueve por ser feliz? ¿Qué alumno a quien refuerzas positivamente no sonríe e intenta mejorar todo aquello que hace? ¿Cómo nos hace sentir el dominio de cualquier idea de una manera propia, vista desde cualquier ámbito tradicional, que hacemos nuestra, que es diferente y original?

La respuesta a estas preguntas es sencilla puesto que el tener la destreza de generar ideas e impulsarlas con propuestas novedosas es lo que se conoce como la capacidad de inventiva, el pensamiento divergente y la imaginación constructiva que tienen algunos individuos y que es necesario impulsar desde las escuelas en nuestros alumnos. Sólo así los cambios en el entorno y las propuestas originales serán llevadas a cabo por los estudiantes en una sociedad muy próxima.

Muchos de ustedes se preguntaran si esa capacidad creativa, ese don de algunos y esa rapidez en encontrar fantásticas y novedosas ideas es enseñable, desarrollable y adquirible, o más bien un factor innato que viene dado aleatoriamente.

Recientes estudios [1] defienden que la capacidad creativa es enseñable, y señalan la importancia de incluirlo en las aulas educativas.

Es fundamental que la acción pedagógica se adapte al contexto educativo en el que se desarrolla, a la etapa educativa, y a los alumnos que se ven involucrados en ella. Aceptemos que la generación de los alumnos de hoy en día viven con unos estados de felicidad que varían

Creemos alumnos con emociones positivas [2], que el día de mañana serán personas felices, con habilidades para resolver cualquier tipo de conflicto que se les cruce en el camino. Cualquier tipo de problema al que se tengan que afrontan lo podrán asumir, valorando las opciones que tengan de una manera creativa para solventarlo del mejor modo.

La propuesta de innovación para el aula de educación primaria tiene en cuenta todos estos aspectos y plantea actividades dinámicas que motiven al alumno y le ayuden al desarrollo de su creatividad, su felicidad, y con ello, sus competencias emocionales que son, a su vez, facilitadoras del buen clima de aula y de su rendimiento académico y laboral.

Basándome en las propuestas y en las ideas positivas de diferentes autores [3] [4] [5] sobre cómo incluir la felicidad y el conocimiento y manejo de las emociones por parte de nuestros alumnos, al igual que mejorar y suscitar curiosidad en el desarrollo de sus habilidades creativas, propongo la inclusión de juegos en el aula con carácter participativo de manera individual que ayude a la libre expresión de los estudiantes, ofreciéndoles infinidad de propuestas y de recursos para que trabajen en sus propios proyectos y en sus ideas personales, que les desarrollen como personas que crezcan dentro de una sociedad globalizada con respeto y fuerza para apoyarse en la libertad de sus ideas y su expresión.

La idea fundamental se basa en empujar a los alumnos a que creen libremente, a que conozcan lo gratificante de poder pensar en una idea y tener la posibilidad de hacer uso de ello de una manera práctica. Un ejemplo simbólico que ha sido usado como recurso educativo en las aulas desde los niveles más sencillos como en las clases de educación infantil, hasta en educación universitaria, ha sido y sigue siendo el uso de murales y presentaciones con estilos muy diferentes y propios. Se ha considerado una manera creativa de dejar a los estudiantes desarrollarse y expresarse de un modo libre sobre cualquier propuesta de trabajo valorada en el currículum, sin embargo, en la sociedad en la que vivimos en la que nuestros alumnos reciben creatividad de otros constantemente a través de sus teléfonos móviles con fotografías en las diferentes aplicaciones o bien en los medios de comunicación, no es suficiente. Planteémonos pues actividades lúdicas que hagan a nuestros alumnos aprender a la vez que crean libremente y se expresan como individuos únicos que son, y al mismo tiempo adquieren conocimientos y desprendan felicidad.

La variedad de actividades propuestas es infinita. Todas ellas se ven reforzadas por las competencias clave de nuestro currículum, desde la competencia digital a la competencia de aprender a aprender. Qué mejor actividad para mejorar esa habilidad creativa que un abanico de adjetivos, actividad que puede ser adaptada para el área de lengua extranjera, donde cada alumno escribe al resto un adjetivo positivo que describa a su compañero, un emocionario para valorar lo que de verdad les hace sentirse felices día a día o un juego de Kahoot de un modo online, en el que pueden competir en línea de un modo dinámico y creativo mientras que adquieren su proceso de enseñanza-aprendizaje.

Es por todo ello por lo que el futuro de nuestras generaciones próximas se debería ver involucrado en un cambio educativo que fomentara su felicidad y su creatividad, creando alumnos más empáticos y mayor facilidad de resolver conflictos. Y de ello sólo depende nuestra capacidad de involucrarnos como profesores en ese proceso de aprendizaje de un nuevo concepto de escuela feliz.

 

BIBLIOGRAFÍA:

[1] González, Mª Á., Llamas F., y Verónica López, V. (2016) Mejora del rendimiento académico de alumnos con necesidades específicas de apoyo educativo mediante una metodología innovadora desarrollando la creatividad y su relación con la lateralidad en Educación Primaria. Revista nacional e internacional de educación inclusiva ISSN : 1889-4208, 9, (1), 179-195 .

[2] Seligman, M. E. P., & Csikszentmihalyi, M. (2000). Positive psychology: An introduction. American Psychologist, 55, 5-14.

[3] Arguís Rey, R. (Coord.), Bolsas Valero, A.P.; Hernández Paniello, S. y Salvador Monge, Mª M. (2011).Programa «Aulas felices». Psicología positiva aplicada a la educación. ISSN, 34. 231-234.

[4] Bona, C. (2016). Las escuelas que cambian el mundo. Servicio de Publicaciones de la Universidad de Murcia . ISSN edición web (http://revistas.um.es/educatio). Barcelona.

[5] Izquierdo, A., y García Fernández-Abascal, E. (2016)
Estructura de la emoción positiva de Flow y la motivación autodeterminada y su relación en el rendimiento escolar en niños de 8 a 12 años. Zaragoza. Universidad de Zaragoza.

1
“¿Te ha parecido interesante este artículo? ¡Dale a me gusta!