1. INTRODUCCIÓN
En la primavera de 2016 desde la Concejalía de Educación del Ayuntamiento de Chilches, se nos propone invertir en nuevas ideas y talleres para los alumnos/as que sean innovadoras y no se hayan trabajado antes.

El equipo directivo del centro se focaliza en talleres vivenciales que desarrollan y fortalecen el terreno emocional y en donde los mayores beneficiarios son los alumnos. Así, se presenta un término novedoso para la mayoría de las educadoras del centro, Mindfulness.

¿Para qué Mindfulness en niños?

La verdad es que, afortunadamente, cada vez hay más estudios que se interesan por el bienestar de los niños.

El psicólogo William James ya advierte en 1890 la importancia de traer una y otra vez, de forma voluntaria, la atención al momento presente. Él entiende que una educación dirigida a mejorar el control de la atención sienta las bases para unos sólidos aprendizajes. Por su parte, el médico norteamericano Jon Kabat-Zinn introduce esta práctica en el modelo de salud occidental y define el mindfulness como la capacidad de  “Prestar atención de manera intencional al momento presente, sin juzgar”. Las dos grandes técnicas en las que se apoya son: la respiración y la relajación.

A raíz de ahí buscamos información sobre esta práctica y a un profesor, terapeuta transpersonal, formador de formadores que nos posibilita realizar esta experiencia innovadora a modo de taller.

Después de leer varios artículos vemos que ya se trabajan nuevas técnicas y prácticas en centros educativos de todo tipo utilizando el yoga, la meditación, Pilates o el mindfulness.

Definición:
El término Mindfulness hace referencia a la capacidad que tiene la mente para concentrarse en el momento presente. Se puede resumir como una actitud ante la vida, un estilo global para afrontar la vida que impulsa las fortalezas de las personas.

Beneficios:
- Mejora el aprendizaje, la atención, la creatividad
- Mejora la concentración, minimiza las distracciones
- Ayuda a regular las emociones, a estar con el enfado, fomenta la seguridad
- Despierta la introspección, enseña a ver más claro el momento presente
- Desarrolla la compasión hacia un mismo y con los demás
- Mejora capacidades pro sociales como la empatía y la paciencia

Y así comienza todo... Se presenta el taller a la Concejalía  de Educación y ésta apuesta por el cambio. Como diría Dan Siegel “…la práctica del Mindfulness es una inversión educativa inteligente y duradera en la prevención en materia de bienestar fisiológico, mental y emocional”

2. PLANIFICACIÓN PREVIA DEL TALLER
Tras varias entrevistas con el terapeuta y facilitador se hace un tríptico con la información básica para informar a las familias y se reparte.
En cada entrevista con el facilitador recogemos la siguiente información y empezamos a estructurar el taller.

Objetivo:
-Acercar e iniciar  a toda  nuestra comunidad educativa en esta práctica
-Incrementar el nivel de atención en las actividades y ejercicios cotidianos en niños de 1 a 3 años
-Potenciar en los alumnos una actitud permanente de consciencia y calma encaminada a desenmascarar automatismos y promover su desarrollo integral
-Que los niños disfruten aún más de su día a día en la escuela infantil y sientan un mayor bienestar

Metodología:
    Basada en el descubrimiento por sí mismo

Actividades:
-Las prácticas propuestas en las tres sesiones del taller con los alumnos, activan la habilidad que reside en cada niño para mantenerse atento y feliz, disfrutando con plenitud de cada momento.

Temporalización:
    Cinco sesiones, de tiempo variable para padres, alumnos y profesores.

Programación: Se reparte el taller en 5 sesiones.

Material:
-Colchonetas para cubrir el aula, para caminar descalzos
-Sala audiovisual: proyector, ordenador, conexión wifi, cámara grabación y equipo de sonido
-25 kg de arcilla
-Papel continuo
-Plástico para proteger el suelo

Evaluación:
    Reunión con el profesorado tras el taller para puesta en común

3. DESCUBRIENDO EL MINDFULNESS – INICIO HACIA LA ATENCIÓN PLENA EN LA ESCUELA INFANTIL “ISABEL GONZÁLEZ TORRES”

DIA 1.- Contacto del facilitador con las educadoras y personal del centro implicado
El facilitador consciente de que nosotras, las educadoras, debemos estar plenamente implicadas para poder transmitir mejor a los niños/as, cada experiencia o actividad de Mindfulness, nos muestra en nosotras esta práctica.

En la primera sesión nos informa y aclara nuestras dudas. Nos orienta y hace participar en actividades las cuales nos acercan a las emociones. Nos guía y hace sentir, vivir y entender el Mindfulness en nuestra propia persona.

Nos ponemos descalzas y en círculo:
1.- Utiliza una imagen de troncos descendiendo por el río para entender el fluir de nuestros pensamientos y nos invita a ver qué papel jugamos con ellos. Cada una de nosotras explicamos nuestro sentir con los pensamientos, en qué medida nos enredamos con cada uno, incluso el tiempo que nos ocupan. Nos da a su vez directrices para acortar ciertos estados de sufrimiento surgidos de ese devenir de la mente.

2.- Nos entrega sobres y comprobamos nuestro interés, imaginación, ilusión, en definitiva vemos a nuestros pensamientos creando imágenes y prediciendo lo que va a suceder como si fuera un regalo, una sorpresa o tal vez instrucciones para el taller, quien sabe. Los sobres no contienen nada. Nos entrega nuevos sobres para abrir en casa, los cuales solo contienen folios en blanco. Esta fue una de las primeras consignas, “no esperar nada del taller, ir con mente de principiante”. Con diversos ejemplos y las acciones puestas en marcha nos conducía a que fuéramos nosotras las que nos diéramos cuenta.

3.-Otra de ellas fue una alegoría. Imaginamos un león frente a nosotras. Nos pidió nuestra posición ante él. Con el criterio de todos surgen 3 opciones. La primera salir corriendo, la segunda atacarle y la tercera permanecer atentas. La idea transmitida es la de OBSERVAR, ser espectador de nuestras sensaciones y evitar con ellos dejarnos arrastrar por nuestros impulsos.

CONSIGNAS DIARIAS DEL FACILITADOR:

Nos da las siguientes pautas para recibir a los alumnos cada día:
- Abrazarlos a la entrada y a la salida.
- Mayor tranquilidad que la habitual
- Colocarnos a la altura de los niños para hablar con ellos, no elevar la voz

DIA 2.- Contacto del facilitador con los alumnos de la Escuela Infantil

Primera sesión con alumnos:
En la entrada a un espacio nuevo los alumnos se muestran agitados, observando y explorando la sala y los diferentes materiales que hay en ella.
Se oye la música instrumental, muy suave. Algunos alumnos atienden  a ella.
El facilitador nos indica que vayamos tumbándonos en el suelo las educadoras, y los alumnos siguen corriendo por el aula. A medida que avanza nuestro aquietamiento su ritmo baja, van cesando sus carreras y gritos.
Nos resulta curioso observar cómo ningún alumno cae sobre nosotros, pasan cerca pero con cuidado al notar que se acercan a nosotras. Se extrañan de nuestra quietud. Observan lo que hace el facilitador, que va diciéndoles que coloquen libros sobre nosotras y luego que los quiten. Ellos le atienden, algunos participan curiosos de la actividad y otros le imitan.
Para finalizar la actividad cantamos una canción y los niños participan de ella, mostrándose calmados cuando la música es lenta y más agitados cuando es rápida.
Tras esta  primera sesión con los alumnos, decidimos  facilitador y dirección del centro,    ofrecer más información hacia las familias, sobre el mindfulness; para el día siguiente preparamos una reunión con ellas antes de la sesión con los alumnos.

DIA 3.- Contacto del facilitador con los padres y segunda sesión con los alumnos
Reunión informativa y primera vivencial  del mindfulness con los padres:
Se les explica la terminología de mindfulness y resuelven dudas. Se ponen en marcha pequeños ejercicios para su comprensión.
Segunda sesión con los alumnos:

Observaciones previas al inicio:
Antes de la entrada a la sala de mindfulness ya nos damos cuenta que tanto nuestro ritmo como el de los niños ha bajado, se forman en tren tranquilamente, sin gritos y con mucha calma.

Durante la sesión:
Nos sentamos en grupos, juntamos las manos, las elevamos y las bajamos lentamente juntos. Esperamos en cada ejercicio a que sean ellos los que accedan a acompañarnos, poco a poco van copiando unos de otros. Sin insistencia acceden.
Caminamos poco a poco juntos,  despacio formando un tren.
Como cada día la sesión termina con una música con más armonías y tono más festivo que invita al movimiento.
Cantamos y gesticulamos las canciones.
Realizan las actividades contentos, tranquilos y participando con alegría. Se consiguen realizar todas  con  tranquilidad.

DIA 4.- Última sesión del facilitador y sesión con las educadoras

Tercera sesión con los alumnos:
Nos sentamos en grupos formando un círculo.
Abrazamos a los niños y nos movemos escuchando el sonido del mar, del agua.
Nos ponemos de rodillas y gateamos y  caminamos juntos.
Nos levantamos, nos juntamos los adultos en bloque y caminamos hacia delante y hacia atrás.
Comenzamos una actividad expresiva y manipulativa con la arcilla, en gran grupo, alrededor del papel continuo. Tocamos la arcilla, insertamos un dedo y luego dos. La partimos en pedacitos y comienzan a hacer un camino juntos los alumnos, finalmente rellenamos nosotros, los adultos, los huecos del camino.
Durante una actividad hemos observado  un cambio que expondremos más adelante.
Segunda sesión con las educadoras:
Recogemos sensaciones y comportamientos observados. Comentamos el trabajo realizado.
Quedamos en pensar y reflexionar sobre la experiencia vivida estos días y pondremos los puntos en común en la sesión de evaluación.

DIA 5 .- Sesión de Evaluación del facilitador con las educadoras del centro

El facilitador de manera natural y distendida nos pregunta por las sensaciones y por nuestra experiencia tras el taller.
Algunas de nosotras le explicamos que hemos notado que la experiencia nos ha acercado a reconocer nuestras emociones.
Hacemos un repaso general de los ejercicios que realizamos en la primera sesión con él, la entrega de los sobres y nos repite la que fue una de las primeras consignas, “no esperar nada del taller, ir con mente de principiante”, para potenciar la atención en cada nueva actividad.
También le explicamos que desde que realizamos el taller, atendemos de un modo distinto, nos damos cuenta antes de que nos enredamos en nuestros pensamientos.
La idea general que se desprende es la de OBSERVAR, ser espectadoras de nuestros pensamientos.
En resumen, coincidimos en que el trabajo en equipo, siguiendo una línea en busca de cierto aquietamiento interior, aporta buenos resultados. Transmitimos ese aquietamiento sin esfuerzo y esto afecta de forma positiva en nuestro trabajo. Cuesta mucho menos realizar ciertas actividades, dado que sostenemos un estado de ánimo que beneficia a todos, tanto a nosotras las profesoras como a los alumnos.
Una inquietud que se queda en el aire, es la aplicación de esta metodología durante el curso escolar, cada semana, como hemos podido ver que hacen otros centros, con resultados más que positivos.

4. COMPORTAMIENTOS APRECIADOS DURANTE LA SEMANA DEL TALLER

EN LOS NIÑOS

ENTRADA: se muestran alegres y cariñosos. Entran pidiendo abrazos.
AULA: más atentos, más obedientes, gritan menos, les molesta cuando alguien sube el tono de voz.
PATIOS: siguen con la regularidad diaria: activos y alegres.
PASILLOS: se nota más calma, menos carreras.
ANTES DE LA SIESTA: más ordenados y obedientes en el momento de higiene. Se acuestan en sus camas, no hay que insistir para hacerlo.
SIESTA: algunos niños duermen más tiempo y sueñan menos. Al despertar están tranquilos.
DESPUES DE LA SIESTA: disminuyen los lloros.
TARDE: siguen con la regularidad diaria aunque disminuyen las rabietas por los juguetes.
SALIDA: se despiden con alegría, la mayoría nos besan y abrazan antes de irse.

Sesión 1: Los niños nos observan, nos cuidan, nos protegen. Tienen cuidado al pasar cerca de nosotras corriendo. Depositan los libros encima de nosotras con delicadeza.
Sesión 2: Se auto regulan solos antes de ir a la sesión. Se implican en las actividades, bajan el tono de voz, participan calmados y tranquilos.
Sesión 3: Este es el cambio que más nos ha llamado la atención durante la última sesión. Cuando somos sus iguales: estamos a su nivel , a su altura, los tomamos de las manos, lo que observamos es que se produce calma, nos imitan , se acercan a nosotras y participan.
Por el contrario cuando no nos ven como iguales, al levantarnos y distanciarnos de ellos, se alejan, se alteran e incluso gritan y así, cesa el aquietamiento.

EN EL PERSONAL

Entrar en contacto con el mindfulness nos removió por dentro,  más sensibles de lo habitual.
Nos produjo una especie de cansancio placentero, nos provocaba más sueño.
Nos facilitó la comunicación entre nosotras.
Se despertaron ciertas tensiones acumuladas y se han aliviado sin esfuerzo.
Nos ha abierto los ojos para mirar el presente.
Nos ha unido como equipo

5. IMPRESIONES RECOGIDAS TRAS EL TALLER

DE LAS EDUCADORAS

“A veces no nos damos cuenta de que la mente va muy deprisa, y que en ocasiones no disfrutamos del presente porque estamos, por ejemplo, juzgando, experimentando sensaciones desagradables del pasado o preocupándonos por el futuro, el mindfulness nos hace estar en el presente”
“Una experiencia muy bonita que he podido compartir con todo el equipo de la escuela. Mi anterior experiencia con el Mindfulness nada tiene que ver con esta, he aprendido”
“Realmente el Mindfulness es una forma de vida”
“Tras la experiencia tienes la sensación que no nos educan ni forman para las emociones y ahora, tras la actividad ves el valor real y práctico que tiene tanto para el cole como para tu día a día”
“Me gustaría experimentar un año completo de trabajo de mindfulness en el aula y ver todos los beneficios que podrían descubrirse tanto en alumnos como en profes”
“Es una tarea de equipo, para que se produzcan cambios reales, debemos funcionar todos a una”
“Nos ha sabido a poco. Me hubiera gustado poder realizarlo más tiempo. Los niños han disfrutado. Los adultos hemos aprendido a parar, respirar y valorar cada momento”
“Una experiencia gratificante ver el nivel de tranquilidad de los niños. Como entraron y como terminó. A través de esta técnica he podido observar como el niño cambia su ritmo, volumen y como llegan a contagiarse de esa calma que podemos transmitir las educadoras”
“Me he dado cuenta que todo influye en los niños, tu tono, tu estado de ánimo; lo más bonito es la delicadeza con la que los niños nos han tratado y nos han cuidado”
“Terminado el taller, me quedo con las sensaciones que produce el abrazo, las sonrisas de los niños con la música, un clima más pausado y relajado en el aula”
“Desconocía la técnica pero se me ha hecho corto. Los niños se lo han pasado muy bien y han tenido ganas de participar”
“Me gustaría haber trabajado en este taller también la relajación tanto individual como grupal”

DE LOS NIÑOS

“Queremos ir más a las colchonetas”
“Jugamos a caminar”
“Cantamos canciones de las manos”
“Oímos música de agua de peces y de ranas”
“Con bolitas marrones hicimos un camino todos”
“Nos gustó jugar todos juntos”
“Los nenes no gritaban”
“El profesor de la coleta hablaba despacito y bajito”
“El profesor era simpático”

DE LOS PADRES

“A nosotros también nos gustaría realizar estas actividades”
“Es algo nuevo para nosotros, desconocíamos estas técnicas”
“Poder ver lo que hacen en estas clases de mindfulness nos ha gustado”
“No imaginaba cómo se podrían trabajar estas técnicas con niños tan pequeños”
“Me parece una técnica buena para seguir trabajando en más ocasiones”
“Me gusta que se innove en educación”
“Me ha hecho ver la educación desde otro ángulo”
“Me ha parecido muy positivo para los nenes, pensaba que los niños no les harían caso pero el segundo día la clase se vio de otra manera y los niños estaban más atentos. Para mí se ha hecho corto el taller”
“Teníamos buenas referencias y la idea nos ha parecido muy buena aunque no hayamos podido asistir”