Imagen generica
¿Aún no estás registrado?
Regístrate ahora, son 2 minutos

Gamificación en matemáticas… ¡es posible!

Inmaculada Moreno Gómez-Valadés

Publicado el 19/03/2021 19:03

A día de hoy, la educación matemática en España está en entredicho, y está ocasionando incluso la aparición de noticias en los periódicos donde se recoge que no hay docentes suficientes para impartir estas y aún más lejos, no se aprende bien esta apasionante asignatura que está presente en nuestra vida cotidiana y en nuestro día a día.

Cabe destacar y analizar los tres planos de las matemáticas, desde un punto de vista institucional, referido a las políticas educativas y los currículos oficiales, desde el punto de vista de la investigación, entendido este como la labor de grupos y asociaciones que trabajan en la didáctica de estas y en su docencia, y por último el plano que refleja la actividad educativa en las aulas. Estos planos arrojan información poco halagüeña al respecto de la situación actual de las matemáticas pero también permiten mirar el futuro con algo más de optimismo.

Se le atribuyen a las matemáticas la etiqueta de asignatura de extrema dificultad, mecánica, inútil… y se crea una potente barrera hacia ella por parte de los estudiantes, que la miran con desmotivación y desgano.

Ello no es así, eso debe de cambiar, debemos conseguir que esta asignatura se entienda, se vea como accesible dándole la importancia oportuna y dedicándole el tiempo de estudio adecuado, derribemos esa barrera.

¿Alguna vez os habéis preguntado qué pasaría si para aprender matemáticas introdujésemos al alumno en “el apasionante y divertido mundo de los juegos”? Pero, en matemáticas, ¿sería posible aprender jugando? Reflexionemos, abramos nuestras mentes a nuevas metodologías y estrategias didácticas.

Si abrimos una ventana al juego como estrategia didáctica conseguiremos que el alumno recobre el interés por aprender diferentes conceptos matemáticos como el análisis, el álgebra, la geometría o la probabilidad... y se motive para sumergirse en el maravilloso y curioso mundo de las matemáticas. Mediante la gamificación, con el empleo de dinámicas de juego en entornos no lúdicos sino educativos, conseguiremos en los alumnos el aumento de la motivación, tanto intrínseca como extrínseca, aumentar también el esfuerzo, mejorar gestión del tiempo y muchos otros valores positivos que aportan los juegos. Con la gamificación en las matemáticas promovemos la participación de los alumnos y el interés por jugar y aprender a la misma vez.

Existen multitud de aplicaciones tecnológicas que permiten crear juegos que permiten introducirse en las aulas para fomentar la motivación por el conocimiento, y cada vez se ven más proyectos de innovación sobre este respecto.

Vistos los efectos positivos hasta la fecha de ello, cabe indicar que ¡la gamificación en las matemáticas suma, suma conocimientos a la vez que motivación! Si mejoramos el rendimiento de nuestros alumnos en esta apasionante asignatura, ¿por qué no?

Aprender jugando aporta múltiples efectos positivos sobre el proceso de E-A, destacando uno muy importante que es el progreso y perfeccionamiento de la propia percepción por parte de los alumnos en relación a sus propias capacidades y cualidades. Si llevamos a cabo proyectos de gamificación en las aulas en nuestras clases de matemáticas, preparando contenidos y desarrollando de forma secuenciada diversas actividades, tareas múltiples y variadas de dispares niveles, guiando y mostrando al alumno las diferentes fases de las dinámicas a realizar con un grado progresivo de introducción de las mismas en relación a la dificultad mostrada, obtendremos como respuesta de nuestro alumnado una actitud positiva y emprendedora para solventar los retos en los que los docentes los embarcamos, respondiendo a estos por sí mismos, motivados en su aprendizaje y desarrollo.

Con la gamificación en la asignatura de las matemáticas creamos en el proceso de aprendizaje un entorno creativo que permite que se favorezca la motivación de los estudiantes de esta asignatura.

Pero ¿cómo introducimos la gamificación en las aulas? ¿no sería muy complicado aplicar la gamificación en esta asignatura? La respuesta es no, y a día de hoy se ha llevado a la práctica en varios centros educativos con resultados satisfactorios.

En cuanto al cómo introducir esta técnica en las aulas de matemáticas, cabe destacar que la gamificación puede llegar a las aulas de forma muy diversa, por ejemplo, en forma de distintas dinámicas de juego con la misión de fomentar la motivación tanto intrínseca como extrínseca de los alumnos. Se trata de crear en el aula un ambiente acogedor y convertir a los alumnos en agentes especiales encargados de aprender por medio de la resolución de los retos que se le muestran en todas y cada una de las diferentes fases de este entrenamiento por medio del juego. Cuando en las aulas de matemáticas aparecen competiciones de juegos matemáticos, donde al estudiante le damos la posibilidad de aplicar multitud de conceptos que han aprendido en el curso o incluso ideas previas de cursos anteriores, y con los cuales ellos pueden ganar las partidas interactuando con sus compañeros, también estamos gamificando en las aulas, y a la vez, fomentamos el trabajo en equipo del grupo de alumnos.

Estas dinámicas de juego pueden permitir al docente trabajar diversas competencias, a la vez que podemos ir facilitando también con esta estrategia trabajar distintas disciplinas. Por ejemplo, podemos introducir en los juegos textos en inglés, y trabajamos el idioma … y un largo etcétera. Destacar que facilitan también la comprensión lectora. Además, se refuerzan aspectos como la gestión de la frustración y la perseverancia ante la dificultad de un reto por parte de los alumnos, no tiran la toalla tan fácilmente.

Por tanto, y sirva este último párrafo de conclusión, la experiencia del juego en las aulas de matemáticas resultará sin dudas altamente gratificante, tiene multitud de aspectos positivos, por tanto: ¡a jugar!

0
“¿Te ha parecido interesante este artículo? ¡Dale a me gusta!