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Qué es luz de gas

Belen Torres Ramirez

Publicado el 09/05/2022 16:05

Existe un tipo de maltrato más sutil, pero igualmente de peligroso y muy difícil de detectar y denunciar, se llama luz de gas o Gaslighting. Se trata de una variable de manipulación psicológica que suele darse en relaciones tóxicas de pareja, familia, amigos o en el trabajo.

Según lo definen los profesionales, la luz de gas es un fenómeno psicológico que consiste en manipular a una persona para conseguir que dude de su propio criterio y crea que no es capaz de discriminar entre lo que es real y lo que no y, por tanto, desconfíe de su criterio.

¿Quieres saber más sobre luz de gas o gaslighting? A continuación, te contamos cómo puedes detectarlo. Además, puedes echar un vistazo a esta formación en igualdad de género y competencias sociales:

¿Cómo saber si es luz de gas?

Como hemos mencionado, se trata de un tipo de manipulación psicológico, en el que el abusador/a manipula (consciente o inconscientemente) a su víctima para que dude de su propio criterio.

Un ejemplo puede ser que la persona que manipula puede negar algo que ha sucedido, sembrando así la duda en la víctima, que ya no sabe qué creer. Esto le genera ansiedad, angustia y confusión.

Y puedes preguntarte, ¿De dónde viene el término luz de gas? El concepto proviene de la película Gaslight (Luz que agoniza es su título en español), en la que el marido de la mujer protagonista provoca ruidos, cambia las cosas de sitio y otra serie de prácticas ocultando que lo hace él y tratando de convencerla de que son cosa suya, hasta hacerla dudar de su propio juicio o salud mental, dudas que él alimenta repitiéndole que está loca. Un claro caso de manipulación psicológica, en el que finalmente ella acaba creyendo que está perdiendo la salud mental.

¿Cómo detectar si eres víctima de luz de gas?

Son muchas las víctimas que sufren este tipo de maltrato psicológico y lo desconocen. Por ello, aquí enumeramos algunas de las señales que se dan en estos casos:

  • Cuestionas tus ideas, pensamientos o acciones continuamente.
  • Te preguntas si eres demasiado sensible y/o empática/o constantemente.
  • Te reconoces disculpándote por todo y con todo tu entorno constantemente: amistades, familia, compañeros de trabajo, etc.
  • No te sientes realmente feliz y te cuestionas por qué no lo eres si aparentemente están pasando cosas buenas en tu vida.
  • Excusas todo el rato a tu pareja delante de tu familia y amistades por comportamientos y acciones que lleva a cabo.
  • Mientes y/o ocultas informaciones de manera habitual para no tener que dar explicaciones a familiares y amistades cercanas.
  • Mientes conscientemente para evitar que cambien tu realidad.
  • Te cuesta mucho tomar decisiones, dudas por todo, incluso por cosas aparentemente muy simples y sencillas.
  • Sientes que todo te sale mal y que no eres capaz de hacer absolutamente nada bien.
  • Te planteas si eres buena madre/padre, hija/o, trabajador/a/, pareja, amiga/o.
  • Escuchas que estás loca/o, que estás perdiendo la cabeza, que las cosas que dices no tienen ningún sentido.
  • Quien ejerce el abuso, da un giro de 360 grados a la situación y le da la vuelta al contexto, situándose como víctima de todo lo que tú haces.
  • Te sientes culpable a menudo. Aparece siempre la culpa y el resentimiento en tu cabeza. Culpa por sentirte responsable de las cosas que salen mal.
  • En ocasiones pareciese que te ves desde fuera, o que tus pensamientos están y salen fuera de ti. Sensación de irrealidad o despersonalización.
  • Nunca llevas la razón en nada. Siempre te llevan la contraria en todo.

¿Qué perfil tiene la persona que hace luz de gas o gaslighting?

La persona que realiza este maltrato psicológico, como hemos dicho, consciente o inconscientemente, suele mentir constantemente. Además, lo niega todo, intentará “compensar” las malas actuaciones, hará que compartas sus inseguridades y sabe cómo manipular a los demás.

Consecuencias de la luz de gas sobre la víctima

La luz de gas provoca muy baja autoestima, sentimiento de culpabilidad y fundamentalmente logra anular a la persona.

El síndrome de la mujer maltratada es el efecto que deja la violencia de este tipo en cualquiera que la sufre. Las mujeres van sintiéndose cada vez más inferiores, menos válidas que el agresor, sienten que son las culpables, las que lo hacen mal y todo esto se consigue a través de este proceso de luz de gas.

Otras formas de violencia psicológica

Otra de los tipos de violencia psicológica más cruel y de los que, desafortunadamente, más se ha hablado en los últimos años es la violencia vicaria. En este caso, se daña a los hijos para afectar a la madre.

Cabe destacar que hay niveles dentro de la gravedad de un agresor, y algunos pueden ejercer un cuidado mínimo hacia sus hijos y no dañarlos directamente en su trato. Aunque si les causen daño al minimizar la figura de la madre.

Lo que está claro es que aún queda un largo camino por recorrer en la lucha contra la violencia de género, y la educación desde la infancia es un aspecto clave en este sentido. De ahí la importancia de la formación de calidad para erradicar una de las grandes lacras de la sociedad actual.

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