Imagen generica
¿Aún no estás registrado?
Regístrate ahora, son 2 minutos

Hipersexualización infantil

Laura López Muñoz

Publicado el 16/05/2017 15:05

LA HIPERSEXUALIZACIÓN INFANTIL

En nuestra sociedad, podemos observar la hipersexualización en la población infantil la cual está cada vez más presente debido a la masiva red de información a la que estamos accesibles y no es provocada por los niños y niñas, ellos son simples víctimas de la información implícita que transmiten los adultos y sobretodo los medios de comunicación. Para comprender en mayor medida el concepto, dispondremos una serie de acepciones desde el punto de vista de diferentes autores:

La hipersexualización consiste en dar un carácter sexual a un comportamiento o producto que no lo tiene en sí. Es un fenómeno de la sociedad según el cual incluso adolescentes y jóvenes adoptan actitudes y comportamientos sexuales considerados demasiado precoces. (Violeta Barrientos Silva, 2009 p. 10)

La hipersexualización coloca a niñas, adolescentes y jóvenes sexualizadas como medio para vender y a niños, adolescentes y jóvenes varones, como posibles compradores de cuerpos y otras mercancías (Madera Pacheco y Pacheco Ladrón de Guevara, 2015, p. 13)

La adopción de actitudes y comportamientos precoces en la juventud y adolescencia, provoca una pérdida de la infancia en nuestra población más joven, sin tener la necesidad de perder esta etapa tan importante, los adultos quieren hacer de sus hijos los más bellos y las más bellas, fomentando en ellos que la estética es lo más importante incluso más que la educación en valores que cada vez brilla más por su ausencia.

Haciendo referencia a la segunda acepción mencionada, debemos destacar el concepto de androcentrismo, en el que el hombre es el centro, dejando a la mujer en un segundo plano.

“El androcentrismo consiste en considerar al ser humano de sexo masculino como el centro del universo, como la medida de todas las cosas, como el único observador válido de cuanto sucede en nuestro mundo (…)” (Moreno,1986, p.16).

Bajo estas líneas debemos hablar de sexualización precoz, ya que esta se ve afectada por los medios de comunicación y lleva a los adolescentes e incluso niños a adentrarse en un mundo nuevo que entra dentro de sus intereses, pero con información atrofiada, la defino de esta forma porque consecutivamente les interesa saber todo lo relacionado con el ámbito sexual por curiosidad y por el término “atrofiada” lo justifico porque dicha información no es real, la aprenden en redes sociales e incluso revistas que se disfrazan como “revistas juveniles” pero su contenido no es el adecuado a la edad a la que supuestamente va dirigida.

Según el sociólogo Javier Elzo ( 2004, p.117) “Siempre que se habla de los medios de comunicación social y de su influencia en los adolescentes se piensa inmediatamente en la televisión y, aunque en menor medida, también en la radio. No soy yo quien va a negar importancia a estos medios en la socialización juvenil (…) Hace no mucho tiempo me encontré en el salón de mi casa con una revista creo recordar que era Pronto pero bien pudo ser otra, como Nuevo Vale, Súper Pop.... La ojeé y me quedé estupefacto. Mi pregunta, más bien mi exclamación fue algo así como esto: "pero, ¿esto es lo que lee mi hija?”.

En estas revistas nos encontramos numerosos consejos de ámbito sexual que no son aptos para niños, pero no nos podemos detener solo en este ámbito, también debemos destacar los consejos sobre maquillaje, información sobre famosos de sexo masculino, consejos sobre ropa, etc. Los cuales convierten a la revista, aparte de no apta a edades tempranas, en una revista con un contenido altamente hipersexualizado. Más que consejos, bajo mi opinión los definiría como imposiciones, ya que realmente les conviene que las niñas que lean esas revistas los lleven a cabo, imponiéndoles cómo debe vestir y que obligatoriamente debe estar maquillada. Destacar también, aunque parezca insignificante, el color que predomina siempre es el rosa.

 Con todo esto se pretende reivindicar que, no siempre las mujeres llevan tacones y vestidos, ni siquiera tienen que estar maquilladas y no es el color rosa el color de las mujeres por excelencia, por lo tanto, como adultos y adultas no debemos transmitir estos estereotipos a nuestros niños y niñas.

 Estas revistas, por supuesto, están escritas por adultos, con mentalidad de adultos. De ahí la irrealidad y la sofisticación de tales “consejos”, haciendo que estas niñas se conviertan en adultas antes de tiempo por el simple hecho de gustar a un chico.

Por lo tanto, podemos aclarar el concepto de hipersexualización infantil bajo las mismas líneas anteriores, definiéndolo como la alteración de actitudes en niños que aún no han llegado a la etapa adolescente, con el fin de que parezcan mayores precozmente.

  Estamos diseñando a jovencitas que más que ser ellas mismas, tienden a aparentar una imagen que se aleja de la realidad. Esa imagen la consideran “ser mujer” cuando realmente serlo implica muchos valores que desconozcan en su totalidad.

La publicidad con menores puede parecer que es un juego divertido, así lo disfrazan los padres para que sus hijos e hijas salgan delante de cámaras aprovechando la belleza de este o si es carismático, cuando en el fondo solamente es puro egoísmo por ganar dinero a costa de estos. Los niños y niñas no tienen el derecho a decidir si quieren que su imagen sea vista por millones de personas, es ahí donde entran los padres como sujetos responsables que parecen no serlo si realizan estas prácticas.

 Estos niños que desde pequeños están ante las cámaras, van perdiendo poco a poco su infancia, sustituir el tiempo de juego y de aprendizaje por anuncios publicitarios o concursos de belleza es una privatización de la libertad que el niño tiene que experimentar en su etapa infantil afectándole en su desarrollo emocional y psicológico. Si tratamos a los niños como mayores, ¿dónde quedará la inocencia del niño?

Estas situaciones pueden provocar abusos a menores, dado que con la facilidad que manejan las redes sociales, y las fotos que puede publicar en estas, creen que son lo suficientemente mayores como para conversar con gente desconocida mediante la red. También mencionar la multitud de niñas con trastornos alimenticios, generado por la publicidad hipersexualizada en la que la imagen ideal de la mujer es extremadamente delgada.

Resultado de imagen de hipersexualidad niñas

 Actualmente, este estereotipo de género también se está extendiendo en el género masculino, teniendo como ideal aquel joven con aspecto deportivo y unos músculos exagerados. Los niños tienen como referencia a futbolistas, ya que estos visten de una cierta manera y tienen un físico atlético lo cual atrae a un gran número de jóvenes del sexo femenino, de esta manera, se convierten en el ejemplo a seguir de muchos chicos.

Como docentes, es nuestro deber inculcar estos valores a parte de las áreas principales que tanto importan en la enseñanza, sin dejar en un segundo plano temas transversales como este al igual que cuidar el currículo oculto que se transmite a los alumnos y alumnas. Tenemos en cuenta la plasticidad cerebral que los niños tienen para adquirir nuevas ideas y conocimientos, por lo tanto, realizar cualquier acción o decir algún pensamiento con un peso sexista considerable, podrá suponer que los niños o niñas lo adquieran rápidamente.

Es primordial enseñar a nuestras niñas que no toda la información es cierta solo porque la sociedad lo ponga de moda o porque lo digan en la televisión, tenemos que acercarlas a una realidad que, aunque sea una minoría, poco a poco, se expandirá y acabaremos con los estereotipos que tanto nos persiguen como mujeres.De este modo, formaremos a niños y niñas con un pensamiento libre de prejuicios, tolerantes y adaptados al medio actual. De igual manera es esencial dejar claro a los alumnos y alumnas que cada etapa requiere una serie de actitudes y que la etapa infantil se debe llevar a cabo con actitudes acordes a su edad. Podemos realizar proyectos con actividades que favorezcan estos valores haciendo partícipes a los padres en actividades de dicha índole para que no estén ajenos a un tema tan actual como es la hipersexualización infantil. 

Bibliografía

Pinilla, M. P., Martínez, M. L., & Cerdá, R. R. Juego preventivo contra la violencia de género en adolescentes.

Ritacco, M. J. (2008). Niñez, Deporte y Actividad Física: Reflexiones filosóficas sobre una relación compleja. Education Review//Reseñas Educativas.

López, L. I. C. (2015). ¿ Puede hablar la juventud? Reflexiones sobre la subalternidad de la condición juvenil y sus trayectorias. Nóesis. Revista de Ciencias Sociales y Humanidades24(47-2), 116-128.

Deza Villanueva, S. (2005). Factores protectores en la prevención del abuso sexual infantil. Liberabit11(11), 19-24.Chávez, N. L. L. LA FEMINIDAD.

Bedia, R. C. (2015). El cuerpo de las mujeres y la sobrecarga de sexualidad.Investigaciones Feministas6, 7-19.

Pons, J. E. NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES EN SOCIEDADES ALTAMENTE SEXUALIZADAS.

Marina, J. A. (s.f.). La sexualización precoz. Obtenido de http://www.movilizacioneducativa.net/pdf/(Microsoft%20Word%20- %20La%20sexualizaci.pdf

Ruiz Marín, E., & y otros. (2011). Los jóvenes, el ideal estético y la televisión. Obtenido de Revista Luciérnaga: http://politecnicojic.edu.co/luciernaga6/pdf/jovenes_ideas_estetico_tv.pdf

Shalit, W. (2012). Retorno al pudor. Ediciones Rialp.

De Beauvoir, S. (2014). O segundo sexo. Nova Fronteira.

Pipher, M. (2006). COMO AYUDAR A SU HIJA ADOLESCENTE: Respuestas sólidas a la anorexia, la sexualidad, la incomunicación, el fracaso escolar y otros problemas. Editorial AMAT.

CONNELL, Robert. (1997). “La organización social de la masculinidad. En: Valdes, Teresa y José Olavarría (edc.). Masculinidad/es: poder y crisis, Cap. 2, ISIS-FLACSO:Ediciones de las Mujeres N° 24, pp. 31-48.

Moreno, M. (1986). Cómo se enseña a ser niña: el sexismo en la escuela (Vol. 6). Icaria editorial.

Elzo, J. (2004). La educación del futuro y los valores. Barcelona, UOC.

Imaz, J. E. (2000). El silencio de los adolescentes: lo que no cuentan a sus padres. Temas de hoy.

45
“¿Te ha parecido interesante este artículo? ¡Dale a me gusta!