Resumen

            A lo largo de este artículo, observamos que en la actualidad el desarrollo de la creatividad en los diferentes niveles educativos se produce de una manera lenta, pues estamos inmersos en una sociedad que evoluciona muy rápidamente y nos demanda tener un pensamiento divergente y ser emprendedores. Por lo tanto, es necesario seguir trabajando para conseguir formar a las personas de forma que sean capaces de desarrollar todo su potencial para no darse de bruces con la realidad una vez finalizados los estudios y se introduzcan en el mercado laboral.

Palabras Clave: Creatividad, pensamiento divergente, espíritu emprendedor, pensamiento creativo.

Introducción

En la actualidad, ¿La educación en los diferentes niveles educativos, desarrolla la creatividad en los alumnos para dar respuesta a la sociedad innovadora en las que nos encontramos sumergidos? En este artículo daremos respuesta a esta cuestión que tanto ha preocupado a muchos durante los últimos años.

            Antes de comenzar a dar respuesta a la cuestión que anteriormente nos hacíamos, es necesario explicar qué es la creatividad. Debemos hacerlo, para comprender mejor la cuestión que nos atañe.  Algunos autores como C. R. Fuentes y Á. Torbay concretan: “El término creatividad parece que hace honor a su significado, ya que el propio concepto ha ido evolucionando desde la concepción de genio, a la de potencialidad y hasta la de valor social, es decir, la creatividad se nos presenta como un desarrollo constante de su propia identidad. […], se ha ido adecuando a su tiempo, dando respuesta, a su vez, a las continuas demandas sociales que exigen evolución, cambio de perspectiva o innovación”. (C. R. Fuentes y Á. Torbay, 2004: 1).

Para mí la creatividad es: la capacidad de imaginar, innovar, emprender que todo ser humano posee para crear cosas nuevas surgidas por la necesidad de dar solución a un problema o situación que se plantea. De tal manera, que dicha capacidad hay que desarrollarla, puesto que no todos los días surgen nuevas ideas.

Ahora bien, ¿Se tiene en cuenta el desarrollo de la creatividad en los diferentes niveles educativos? Para dar respuesta a esta interrogación, iremos indagando cada nivel educativo para ver si actualmente se desarrolla el pensamiento constructivo en cada uno de ellos. Por todos es sabido que en la educación, sea cual sea el nivel educativo, los maestros, profesores, docentes, etc. han de impartir una serie de contenidos a lo largo del curso académico. Es cierto que impartir dichos contenidos teniendo en cuenta el desarrollo de la creatividad es una tarea más que compleja, pues requiere de un trabajo laborioso.

En cuanto al nivel educativo de infantil, nos encontramos con un artículo en el cual se nos explica que se desarrolla la creatividad de los alumnos como nos exponen las maestras de infantil: “Arantza de las Heras y Rosa Fernández se dieron cuenta en cuanto empezaron a ejercer de que perdían algunos niños cuando se les obligaba a sentarse a hacer fichas y seguir un libro con tres años. Así que en las aulas del colegio público Aldebarán en Tres Cantos (Madrid) los alumnos de cinco años desarrollan su creatividad cada uno a su ritmo. Cada mañana se reúnen en asamblea y deciden qué quieren hacer, y las maestras encauzan sus deseos. No se trata de decir: haz lo que quieras. Le planteas preguntas y luego él opta por lo que quiere hacer. Sin olvidar que a través del conocimiento del sistema solar se puede introducir lógica matemática o lectoescritura”. (Elisa Silió, 2013).

En lo que respecta a la educación primaria, el método Montessori a cobrado especial relevancia y existen centros en los que se lleva a cabo este método, como es el ejemplo del centro Montessori-Palau (Girona), su directora, Montse Juliá nos comenta: “en las enseñanzas infantil y primaria cada uno va por libre el tiempo es fundamental para que las ideas fluyan y se juntan en el mismo aula niños de tres a cinco años y de seis a ocho. Así juegan tres papeles. El de pequeño, que tiene como referente al mayor; el de mediano, y el grande, que consolida lo aprendido. El maestro del método Montessori planifica algo nuevo cada dos días, y cada cual decide si va a hacer sumas, leer o aprender ortografía”. (Elisa Silió, 2013).

¿Qué ocurre con los alumnos de secundaria? Existen análisis en los que queda demostrado que los alumnos de secundaria tienen creatividad, pero no tienen consciencia de ello, por lo que no la pueden desarrollar para dar respuesta a los problemas y situaciones que se nos plantean en la sociedad actual. Según Francesc Esteve Mon: “Los actuales estudiantes de secundaria a pesar de tener un nivel normal-alto de creatividad, poseen una percepción desenfocada de sí mismos y carecen de mecanismos para desarrollarla”. (Francesc Esteve Mon, 2008)

En cuanto a los estudiantes de educación superior, hay estudios en los que se observa que el pensamiento creativo se desarrolla en muy poca medida. Según Francesc Esteve Mon: “hay una descompensación evidente en el fomento del pensamiento divergente. Estas habilidades se potencian bastante en ciertas áreas del conocimiento pero se potencian muy poco en otras. También se puede observar, a tenor de las respuestas dadas en el estudio sobre la priorización de objetivos, que en general los actuales planes de estudio fomentan de forma adecuada el aprendizaje memorístico, y dejan peor parados otros aspectos como el espíritu emprendedor o la iniciativa, tan valorados por la sociedad actual”. (Francesc Esteve Mon, 2008)

Entonces, ¿Da respuesta la educación a las exigencias de la sociedad? La sociedad actual requiere a las personas ser innovadoras (como ya he comentado anteriormente), se demandan nuevas competencias personales, profesionales, sociales para hacer frente a los constantes cambios a los que estamos sometidos debido a que la sociedad avanza muy avivadamente.

Asimismo, hoy día, existen niveles educativos en los que se mata la creatividad de los estudiantes como nos dice Robinson: “al profesor solo le interesa que se conteste lo que está en los contenidos del temario, lo que provoca la frustración de aquellos niños que son más arriesgados y a los que les gusta improvisar. Eso provoca que cada vez se atrevan menos a pensar de manera diferente por miedo a equivocarse. Tiene un comportamiento más rígido y convergente. Todo ello, en opinión del pedagogo, tiene su origen en una escuela anacrónica concebida durante la revolución industrial pensando en la producción en cadena. Un esquema que casa mal con una sociedad basada cada vez más en los servicios y el conocimiento”. (Elisa Silió, 2013).

No obstante, queda demostrado que todavía los alumnos aprenden los contenidos de memoria, por lo que cuando éstos salen a la calle en busca de empleo se topan con la realidad, una realidad que dista mucho de lo aprendido a lo largo de su vida escolar.

            En conclusión, la educación desarrolla la creatividad de los alumnos según hemos ido viendo a lo largo de este artículo en los niveles de infantil y primaria. Pero, ¿Qué ocurre en los niveles de secundaria y superior? Este progreso se produce más lentamente que la evolución de la sociedad, por lo que todavía nos queda mucho por hacer para equipararnos a los cambios que se producen en la sociedad. Desarrollar la creatividad al mismo tiempo que impartir los contenidos de las diferentes materias resulta una ardua tarea, pero por ello no podemos escoger lo fácil (explicar los contenidos a los alumnos y que contesten los exámenes); ante lo difícil, debemos abrir nuestra mente hacia nuevas metodologías que incluyen la evolución de la creatividad y que nos abren las puertas hacia el mundo innovador y emprendedor en el que nos encontramos zambullidos, pues el mundo de lo complicado nos hace descubrir cosas maravillosas e inimaginables. Las personas debemos aprender que las cosas requieren de un esfuerzo, que si no conseguimos aquello deseado a la primera, lo lograremos más adelante. Como nos dice Will Smith: “No existe una manera fácil. No importa cuán talentoso seas, tu talento te va a fallar si no lo desarrollas. Si no estudias, si no trabajas duro, si no te dedicas a ser mejor cada día”.  Ahora bien, ¿Están los alumnos de hoy día preparados para la vida que les espera?

Bibliografía

- Francesc Esteve Mon. (2008). Análisis del estado de la creatividad de los estudiantes universitarios. Univest 08. Girona. [Fecha de consulta: 15 y 16 de Noviembre] Disponible en : https://s3.amazonaws.com/academia.edu.documents/15248119/124.pdf?AWSAccessKeyId=AKIAIWOWYYGZ2Y53UL3A&Expires=1510750604&Signature=iKudpHCo1EvCaRNva0I6QUDPpLw%3D&response-content disposition=inline%3B%20filename%3DANALISIS_DEL_ESTADO_DE_LA_CREATIVIDAD_DE.pdf

- Fuentes, C. R. y Torbay, Á. (2004). Desarrollar la creatividad desde los contextos educativos: un marco de reflexión sobre la mejora socio-personal. Revista Electrónica Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación, 2 (1). [Fecha de consulta: 15 de Noviembre] Disponible en: http://www.ice.deusto.es/RINACE/reice/vol2n1/Res_Fuentes.htm

- Silió, E. (2013). La buena escuela no asfixia la creatividad. El País, 32-33. [Fecha de consulta: 15 y 17 de Noviembre].

- Smith, W. Frases de Will Smith. [Fecha de consulta: 21 de Noviembre]. Disponible en: https://twitter.com/educacion_na/status/478181955029458944