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La revolución educativa a través de la inteligencia musical

Carmen Laura Molina Serrano

Publicado el 07/04/2019 16:04

     

 Todos alguna vez hemos oído hablar de los beneficios que tiene la música en el cerebro de los niños, también se ha demostrado que la música influye no solo en el momento de escucharla sino también en el desarrollo de las personas a largo plazo, que los efectos que provoca pueden ser beneficiosos para el tratamiento de algunas enfermedades y, además, que esta influye en el desarrollo de la inteligencia. Algunas teorías también nos cuentan, que los niños que escuchan música desde pequeños y de forma constante, tienen mejores habilidades del lenguaje, son más creativos y en definitiva, son más felices.

        Pero, sabiendo esto, me gustaría que nos planteásemos dos cuestiones muy entrelazadas. La primera, el porqué de todos estos beneficios que la música provoca, y si en realidad es así, que la música nos ofrece tantos beneficios y desarrolla un papel tan importante en el proceso de enseñanza-aprendizaje de los alumnos y alumnas, me hace plantear la segunda cuestión que es, por qué no la utilizamos en la educación como una base consistente que potencie y mejore el aprendizaje de todas las áreas y, de esta manera, podamos llegar a desarrollar una educación integral del alumnado.

       La beneficiosa cara de la música

     Para la primera cuestión me basaré en la teoría de las inteligencias múltiples de Howard Gardner (1983), debido a la importancia que le da a la que llama “Inteligencia Musical”. Gardner define la inteligencia como la capacidad que tiene un individuo de resolver problemas, o crear productos que sean valiosos en uno o más ambientes culturales. 

      Esta nueva teoría plantea una revolución del sistema educativo, de una escuela-fábrica que produce, mide, segrega y selecciona hacia una auténtica revolución educativa. También pasamos de una escuela tradicional que se basa en un modelo de inteligencia única, hacia una escuela que se basa en el potencial y en la diversidad de talentos. Esta nueva teoría explica que hay diferentes maneras de ver o sentir el mundo, y por tanto diferencia entre estas inteligencias.

        Las inteligencias que Gardner propone son ocho:

  • La inteligencia lingüística,
  • Inteligencia musical,
  • Inteligencia lógico-matemática,
  • Inteligencia espacial,
  • Inteligencia cinético-corporal,
  • Inteligencia intrapersonal,
  • Inteligencia interpersonal.

      Aunque se han ido planteando más inteligencias propuestas por otros autores, pero en 1997 Gardner sumó una octava que se podría considerar junto a estas siete, la inteligencia naturalista o ecológica. Aun así, no existe ni existirá nunca una sola lista aceptada de forma universal de las inteligencias humanas. Jamás podremos ver una lista con 1 o 100 inteligencias que puedan aceptar todos los investigadores.

 

      ¿Realmente somos conscientes del poder que tenemos al alcance de nuestras manos?

      La inteligencia musical está presente en todos los cerebros humanos, por tanto todos están dotados para hacer música, aunque unos estén más desarrollados que otros. Al hacer música, todas las inteligencias se activan, ya que es la única inteligencia que aglutina a las demás: según un estudio realizado por Laurel Trainor, neuróloga y psicóloga. Cuando una persona hace música escucha, ve y lee la partitura, interpreta, se emociona, recuerda, imagina, anticipa lo que sonará y coordina su motricidad. Cuando una persona hace música se activa la corteza visual y auditiva, la corteza sensorial táctil, corteza motora y pre frontal, el cerebelo, los ganglios basales, el área de broca donde está el lenguaje, los sistemas límbicos donde están las emociones, el hipocampo y los lóbulos parietales.

        Estas son 11 partes que se ponen a funcionar a la vez. Para ella la música se convierte en un gran acelerador neuronal.

     Entonces si la música es tan importante para el desarrollo del aprendizaje no es entendible que la matemática o la lingüística se desarrollen a nivel superior en la escuela, porque estaríamos creando seres humanos incompletos que tendrían una parte de su cerebro sin desarrollar o bien, no lo suficientemente desarrollada.

      Ahora sí planteo mi segunda cuestión, que es el por qué no exprimimos la música en  la enseñanza del alumnado. Cuestión que es difícil de contestar, ya que estamos ante un sistema educativo en el que se le da mucha más importancia al aprendizaje cognitivo que al creativo, creemos que trabajando las matemáticas y la lengua, obtendremos a alumnos brillantes, esto no quiere decir que estas áreas de conocimiento no sean importantes, claro que lo son y mucho, sino que, deberíamos saber que explotando otras áreas de nuestro cerebro conseguiríamos en menos tiempo, mejores resultados.

 

       El cambio que la educación necesita

      La propuesta que se podría plantear para llegar a alcanzar un giro en lo que se refiere  a la educación, sería el trabajo a través de proyectos en los cuales con la música trabajemos todas las áreas, y así desarrollemos todas las inteligencias, de manera conjunta para obtener un desarrollo integral del alumnado, trabajando de forma transversal con la música no para crear a grandes músicos, sino para que disfruten de la música y lleguen a ser mejores alumnos y alumnas .

      La finalidad principal, es que la música se convierta en una herramienta troncal que nos transforme tanto por dentro, como por fuera. Porque la música es una parte fundamental en el cerebro, una parte única como es la matemática o la cinético corporal, que si no se trabaja en el colegio no se desarrolla todo lo que se debería, además esta asignatura no es importante solo por sí misma sino que potencia a todas las demás.

        A través del trabajo de la música en el aula, tanto de Educación Primaria como de Educación Secundaria,  quiero intentar dar un soplo de aire fresco en la educación, que creo que es muy necesario, ya que, estamos en un punto en el que hay tantas innovaciones educativas, aunque la música es dejada en un segundo plano. Pienso que esto está ocurriendo debido a la falta de conocimientos que tienen la inmensa mayoría de docentes sobre este tema, es decir, no se conocen plenamente la cantidad de beneficios que tiene la música llevada a la educación, tanto como asignatura básica, como área que implementa a las demás.

      Ahora bien, a mi parecer, este artículo puede ser un buen comienzo para tomar conciencia de que, fusionando la música con las demás áreas de conocimiento podemos crear o potenciar a un modelo de alumnado con unas características superiores al que hasta ahora conocemos. Un alumnado con una educación integral, y que potenciando a cada uno/a en sus virtudes y no haciendo hincapié en las áreas que les cuesten más trabajo obtendremos unos resultados increíblemente buenos.

     Sabemos que todas las personas no somos iguales, por tanto, hay que encontrar la manera de adaptarse a las necesidades de cada una, por eso quiero resaltar las investigaciones sobre las inteligencias múltiples, aún más en la de Howard Gardner, en la que me he basado, donde explican las diferentes inteligencias que se pueden potenciar en cada uno de nosotros, dándole una gran importancia a la música como potenciadora de todas las demás inteligencias.

      ¡Musicalízate y avanza!

      Ahora que ya conoces los beneficios que se podrían obtener al aplicar la música en el aula como apoyo para trabajar las demás áreas y desarrollar una buena educación en valores,  ¿estaría bien seguir siendo tan primarios como para no usarla en el proceso de enseñanza-aprendizaje de nuestro alumnado? La respuesta a esta pregunta creo que es fácil, porque si tenemos en nuestras manos tal cantidad de recursos para crear una educación en la que con menos esfuerzo se consigan más resultados, no consigo comprender el por qué no los usamos.

      Dicho esto, hay que añadir que la música es felicidad, o más bien, es el punto de partida de todos los que son felices.  Este arte es vida, da vida. Al igual  que es inconcebible la música sin vida, todavía lo es más si nos planteamos una vida sin música. La música es poesía, es lenguaje, el lenguaje de las almas, con la que pones a flor de piel los sentimientos y puedes expresarlos como ni la mejor de las poesías podría hacerlo.  Porque cuando las palabras fallan, la música siempre habla. No desaprovechemos todo esto, cuando podemos sacar mucho más en lo que se refiere a la educación.

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