El término yoga, significa unión y su objetivo es lograr un equilibrio físico, psíquico y espiritual.

Es una disciplina india muy universalizada, que cada vez goza de más popularidad y que evoluciona adaptándose a las necesidades de la sociedad.

Sus movimientos relajados y sus técnicas de respiración producen beneficios para la salud mental y física de los niños. Por lo que esta práctica, se puede emplear tanto en el campo escolar dentro de los centros educativos como a nivel familiar.

¿En qué consiste el yoga infantil?

El yoga infantil, por tanto, se trata de adaptar esta antigua disciplina a través del juego, a niños/as de entre y 4 y 12 años. Se practicará desde un entorno divertido y dentro de un ambiente de calma y bienestar. Aprenderán a conocer su cuerpo y conectar con su mente. A través del control de la respiración y de las posturas, los niños van a mejorar habilidades tales como la relajación, la atención, la memoria y la concentración.

Se utiliza también para que los niños fortalezcan su cuerpo y practiquen estiramientos.

Es importante ser cocientes al realizar yoga infantil, que lo estamos practicando con niños. Debemos ser pacientes y animarlos en todo momento a realizar las posturas y que se sientan felices, las hagan bien o no.

Beneficios del yoga infantil

La práctica del yoga en edades infantiles aporta entre otros los siguientes beneficios:

• - Aporta calma y relajación. Se realizan ejercicios para controlar la respiración. El notar como pasa el aire por el cuerpo, aporta a los niños calma.
• - Se aprende a respirar.
• - Mejora la concentración. Los ejercicios de yoga exigen concentración, es por ello que el niño aprenderá a no distraerse al realizar estos ejercicios y luego podrá aplicarlo a otros ámbitos de su vida cotidiana o escolar.
• - Fortalecimiento de los músculos.
• - Mejora de la flexibilidad y el equilibrio.
• - Mejora la postura. Mediante los ejercicios de yoga se fomenta buenos hábitos posturales tales como: sentarse, andar… que se podrán aplicar también en su vida cotidiana.
• - Agudiza los sentidos.
• - Mejora de la autoestima. El realizar estos ejercicios favorece el conocimiento de uno mismo con sus virtudes y defectos.
• - Es una actividad divertida, con la que los niños lo pasan muy bien, realizando las distintas posturas asociadas a un animal concreto (rana, cisne, escorpión, cobra, perro…)

Como se puede comprobar, son muchos los beneficios que el yoga infantil puede aportar en niños de edades escolares. Puede ayudar a aliviar el estrés, a que adquieran autocontrol, mejoren su salud y emociones. Todos estos beneficios los podrán aplicar en un futuro tanto a ámbitos de la vida cotidiana como a escolares.

Posturas de yoga para niños/as en edad infantil.

A la hora de realizar una sesión de yoga infantil, se deberia estructurar de la siguiente forma:

• - Ejercicios de calentamiento.
• - Ejercicios de respiración inicial.
• - Realizar las posturas que crea oportunas para la sesión.
• - Relajación final.

Es importante escoger un lugar tranquilo y recomendable que los niños lleven ropa cómoda.

Se puede utilizar una colchoneta.

Algunas de las posturas más practicados en yoga para niños son:

• - Postura de la mariposa. Ayuda a aliviar la ansiedad y el cansancio. Mejora la flexibilidad de las caderas y a mantener la espalda erguida.

• - Postura del árbol. Con esta apostura se desarrollará el equilibrio, el autocontrol y la concentración. Se fortalece la columna y las extremidades inferiores.

• - Postura de la cobra. Esta postura va muy bien para aportar flexibilidad a la columna y fortalecerla. Permite la apertura del pecho y esto repercute que pueda respirar mucho mejor.

• - Postura del perro. Este ejercicio o postura ayudara a la oxigenación cerebral, por lo que va a mejorar la concentración. Mejora la musculatura dorsal.

• - Postura del gato feliz y gato enfadado. Favorece la flexibilidad de la columna vertebral y el cuello, la circulación sanguínea y facilita la digestión.

• - Postura de la rueda. Va muy bien para estirar toda la parte del abdomen y el pecho.

• - Postura de la rana. Se adquiere flexibilidad en la cadera y las rodillas.

Como podemos observar, la práctica del yoga con niños puede resultar muy beneficiosa a nivel físico y mental. Esta actividad se podría incluir tanto en el ámbito escolar como en familiar.

Las posturas que se practican pretenden conectar cuerpo y mente y son muy fáciles de recordar por los niños, y así poder realizarlas en cualquier momento.