Han salido a la luz unos últimos datos sobre el desempleo juvenil, el cual se ha situado en España en un 45%. Aunque este porcentaje no afecta a todos los jóvenes por igual, sino que está íntimamente relacionado con su nivel de formación.

En este sentido, las personas con un título superior (ya sea universitario o de FO superior) la tasa de paro se encuentra en un 8,67% y en concreto el de los universitarios es del 15,28%. Los jóvenes que completaron los estudios de educación secundaria de segunda etapa (FP medio o Bachillerato) tienen un nivel de desempleo de 15,92%, quienes tan solo llegaron a la primera etapa de secundaria (ESO) casi del 20,47% y por último el de los jóvenes que no tienen ningún título se sitúa en un 43,72%.

Por lo tanto, y según estos datos, parece que el gran problema de España es el fracaso escolar. Durante los años de la crisis, el abandono escolar temprano entre jóvenes de 18 y 24 años de edad se ha reducido si lo comparamos con el 31,7% en el año 2013 frente el 18,3% en 2017.

Pero quizás este problema esté estrechamente relacionado con la falta de una orientación adecuada y la escasez de información y de datos que ayuden a tomar a edades tempranas la decisión de qué estudios cursar.

En un estudio sobre las ofertas de empleo, hemos podido descubrir que el 60% de las ofertas de trabajo son para los titulados universitarios (8.257,3 personas). Por otra parte nos encontramos con que otro 39% de las ofertas están dirigidas a las personas que han estudiado un FP.

Los salarios, por otra parte, son también mayores entre los universitarios, sobre todos a medida que han aumentando la experiencia laboral y la edad de los trabajadores.

Por lo tanto, vemos que actualmente se le da mucha importancia a la titulación que tengamos a la hora de acceder a un puesto de trabajo adecuado. ¿Qué pensáis vosotros acerca de eso?