Con el fin de las navidades llega para la mayoría de los estudiantes una de las peores épocas del año: los exámenes de Febrero. Debemos dejar atrás las fiestas y los regalos para dejar paso a los libros y a las horas dedicadas al estudio en la biblioteca. Pero, ¿cómo podemos fomentar que nuestro estudio sea efectivo y nuestros resultados en los exámenes los esperados?
Antes de comenzar a ponernos a estudiar para los exámenes de Febrero es importante que tengamos todos nuestros apuntes controlados y localizados y que organicemos nuestra mesa de estudio. Es importante que nos deshagamos de aquellas cosas que nos puedan molestar a la hora de estudiar.
Sería conveniente que tuviéramos al alcance un calendario en el que pudiéramos ver todos los exámenes de Febrero y calcular el tiempo que podemos dedicar realmente a cada asignatura y que nos organicemos nuestros tiempo. Debe ser un horario real, en el que seamos realistas de nuestras limitaciones y de dedicarle más horas a las asignaturas que más nos pueda costar. No olvides incluir en dicho horario el tiempo que irá destinado para el descanso y el ocio.
Durante el tiempo que estemos preparándonos los exámenes de Febrero, debemos tener cuidado con las cosas que comemos y bebemos. No debemos atiborrarnos de bebidas azucaradas ni de estimulantes como el café para mantenernos despiertos durante largas jornadas, ya que si no descansamos lo suficiente, el cansancio se irá acumulando y por lo tanto no rendiremos lo mismo a lo largo que pasen los días.
Sería buena idea contar con un horario fijo de estudio, haciendo descansos de 5 a 10 minutos por cada hora que estudiamos. No debemos dejar el estudio para el último momento. Una buena organización del tiempo nos permitirá controlar el temario cuando la fecha del examen sea cercana y nos permitirán ir tranquilos al examen final.
A la hora de estudiar, existen miles de técnicas de estudio igual de válidas. Debemos escoger las técnicas con las que nosotros nos sintamos más cómodos, puede ir desde el subrayado, a la síntesis por medio de esquemas, o técnicas memorísticas.
El repaso antes de los días del examen es uno de los momentos esenciales, ya que en estos momentos será cuando podamos asegurarnos lo aprendido. Un buen repaso, dejando los apuntes a un lado y sin mirar los libros, nos puede dar la garantía de que verdaderamente controlamos el temario y por lo tanto, iremos más tranquilos al momento del examen.
Como vemos, no existe ninguna ciencia ni ningún misterio a la hora de aprobar los exámenes de Febrero, pero siguiendo unos simples consejos, podemos facilitar mucho el objetivo principal: aprobar cada uno de los exámenes de nuestra carrera o curso escolar.