Como puede la robótica terapéutica tratar el alzhéimer

La robótica terapéutica o roboterapia , consiste en la utilización de robots para llevar a cabo programas terapéuticos los cuales son diseñados por médicos, enfermeros y trabajadores sociales.

Aunque parezca un término muy novedoso, este proceso apareció ya hace algunas décadas. Uno de los primeros robots en aparecer y que se ha hecho muy famoso, es Paro, en España, llamado Nuca. Se trata de un robot que tiene forma de foca, con una apariencia de peluche. Fue diseñado en 1993 y su inventor, Takanori Shibata, asegura que reduce los síntomas del Alzhéimer y de la quimioterapia. Además también tiene algunos efectos positivos en comparación de terapias más tradicionales, como sería el caso del uso de animales, en pacientes con Síndrome de Down, autismo o afasias. Esta foca robótica, nació como una herramienta terapéutica, no farmacológica, que busca reducir el estrés, la ansiedad, favorecer la autonomía y aumentar la autoestima. Además, puede expresar emociones, abriendo y cerrando sus ojos o con el movimiento de partes de su cuerpo como la cabeza y las aletas.  

Algunas de las características que cumplen los robots terapéuticos son (CRE Alzhéimer):

• Su forma, tacto, comportamiento y respuestas que den, deben ser iguales o lo más parecidas posibles al animal al que pretendan imitar.
• Deben ser fácilmente aceptados por los usuarios.
• Deben ser inofensivos e higiénicos.
• Deben de evitar los comportamientos repetitivos y predecibles.
• Tienen que ser fáciles de manejar y utilizar.

Podemos tener en cuenta también, que los robots que imitan a animales que no son excesivamente  familiares son mejor aceptados.

Tenemos la oportunidad, de destacar el uso de la roboterapia  en pacientes con alzhéimer, gracias a ciertos beneficios, que ya han sido demostrados. Las personas que padecen demencia sufren pérdidas de memoria que conllevan cambios o alteraciones de la personalidad, pudiendo provocar en el paciente, un estado de desorientación, agresividad y/o depresión. Con la utilización de esta técnica, podremos reducir la apatía y la agresividad, debido a que se estimula la interacción y la comunicación y se estimulan, al mismo tiempo, las capacidades motoras y cognitivas.

Además, por otro lado, también ayuda a estos pacientes con tareas cotidianas del día a día, resultando de gran utilidad a estas personas, que no les queda más remedio que convivir con la enfermedad. Esas tareas de las podríamos hablar, serían por ejemplo, recordarle al paciente que se debe de tomar su medicación, llevar a cabo actividades lúdicas o ayudarles con las tareas domésticas. .

Las funciones que podremos trabajar con un robot terapéutico, con las personas con demencia, son en cuanto a lo cognitivo, lateralidad, esquema corporal, atención, memoria, reminiscencia…,  la parte funcional, la afectivo emocional, a través de expresiones de emociones positivas, la parte sensorial, con la estimulación táctil, auditiva y visual, y por último, lo psicosocial, por medio de la interacción con otros usuarios o  la relajación,  entre otras técnicas.

Podemos hablar por tanto, que no sólo va a mejorar el bienestar y la calidad de vida en los pacientes, sino que además, también lo hará en sus familiares y cuidadores.