¿Conocías a María Montessori?
Seguro que alguna vez has escuchado hablar del término Montessori. Pues bien, este procede de María Montessori, quien, a día de hoy, sigue considerándose una importantísima educadora.
Fue una italiana que revolucionó el sistema educativo, aplicando prácticas experimentales con las que consiguió sorprendentes resultados, desarrollando así sus propios métodos.
Ella ponía al niño como el protagonista del proceso de enseñanza-aprendizaje, mientras que el docente, tan solo sería un mero guía. Elaboró numerosos materiales con los que favorecer el autoaprendizaje, además adaptó la escuela al propio alumnado, ya que se basaba en unos principios muy claros, buscando siempre la iniciativa y el aprendizaje por descubrimiento, favoreciendo la independencia del grupo.
A raíz de toda su experiencia, desarrollo la pauta Montessori, que tendría el objetivo de fomentar una mayor autonomía en los primeros pasos en la escritura.
Importancia de la escritura
Aprender a escribir en una actividad que conlleva mucha práctica pero que es vital para desarrollar distintas aptitudes y habilidades humanas, entre las que destacamos: la concentración y la atención, la organización, la coordinación fina, la memoria, etc.
Se trata de un ejercicio indispensable para el aprendizaje, ya que, sin la lectura, el alumnado no dispondría de la capacidad para asimilar los diferentes conocimientos que se dan en el aula.
Escribir puede resultar una de las tareas más complejas en los pequeños, pero que permite que permanezcan contenidos estudiados además de estructurar el razonamiento. Por ello, cuando los pequeños se inician en esta tarea, resulta tan importante el correcto uso de materiales que los guíen en este aprendizaje y que puedan realizarlo con menor dificultad.
Un ejemplo de esto es la pauta Montessori a la que hacíamos referencia con anterioridad.
La pauta Montessori para escribir
Se trataría de una pauta de caligrafía que permite el aprendizaje de la escritura.
Está compuesto por un rayado en el que el alumnado deberá ir escribiendo las letras, donde se pueden distinguir tres partes delimitadas por cuatro líneas:
- El cuerpo de la letra minúcula
- La prolongación superior para algunas letras como: la “b” o la “l”
- La prolongación inferior para: la “j” o la “g”
Esta guía tan detallada permitirá alcanzar un alto perfeccionamiento en la escritura. Además, también se pueden distinguir dos niveles:
- Interlineado de 5mm: la pauta principal tiene un mayor grosor y la distancia entre la superior y la inferior es muy extensa. Este tipo es el recomendable para el comienzo de las primeras letras.
- Interlineado de 3,5mm: la pauta principal es menor y la distancia entre la superior y la inferior es muy estrecha. Apropiado para aquellos alumnos que estén algo más avanzados y que quieran ir perfeccionando, ya que requiere de una mayor precisión.
¿En qué se diferencia del rayado clásico?
Tras ver en qué consiste la pauta Montessori puede quedarnos alguna duda con respecto al rayado clásico que todos conocemos y hemos llegado a practicar alguna vez.
La diferencia es que este último tiene cuatro líneas paralelas. Hay dos centrales en las que se escribe la minúscula, otra por encima que marca el límite de las mayúsculas y de las astas altas (l o t) y otra por debajo que marca el límite de las astas bajas (g o j).
¿A qué edad se podría comenzar con ella?
El método Montessori pone de manifiesto que la iniciación de los niños en la lectoescritura sería en edades muy tempranas, en torno a los 13 o 14 meses.
Para ello, es indispensable que, previamente, se haya ido estimulando y despertando la motivación de los niños en la lectura. Por ejemplo, esto se podría hacer a partir de diversos cuentos que se les vayan leyendo desde que son bebés. Una vez que llegan a la edad indicada, no estarían preparados para escribir por ellos mismos, pero sí para comenzar con una fase previa de preparación, tras la cual ya sí que podrán comenzar con dicha pauta.
De cualquier forma, hay que tener presente, la necesidad que pone de manifiesto dicho método, de respetar los distintos ritmos de aprendizaje de cada niño e ir adaptándonos a cada uno de ellos.
Pasos a seguir para la práctica de la pauta Montessori
Como decíamos, previamente a la utilización de la pauta Montessori, es necesario una fase de preparación. En dicha fase es muy importante preparar y trabajar la distinción de los sonidos. Para ello, no debemos presentar palabras sino focalizarnos tan solo en la pronunciación de determinadas letras.
Centrándonos en la escritura, el primer paso, es continuar con la distinción entre mayúsculas y minúsculas, pudiendo comenzar con las mayúsculas ya que suelen resultarles más sencillas.
Podemos hacer más completo el proceso de aprendizaje de la escritura de los niños con actividades que estimulen sus sentidos. Por ejemplo, pueden pasar determinados objetivos de un lugar específico a otro o repasar con sus propios dedos algunas letras que se hayan hecho con diferentes materiales.
Posteriormente, se podrá pasar al alfabeto móvil, donde se pondrán las consonantes en un color y las vocales en otro. La intención es hacerles ver que a partir de todas esas diferentes letras se podrán formar palabras.
Cuando sean capaces de componer palabras será el momento ideal de comenzar con la escritura. Primero, sería recomendable que las escribieran en una pizarra con tizas. Una vez lo domine, podremos pasar a escribir en papel con la pauta Montessori.
¿Conocías esta pauta de Caligrafía Montessori? ¿Qué te ha parecido?
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