En los últimos años escuchamos o leemos en muchos sitios nuevas metodologías, nuevos avances en las tecnologías aplicadas a la educación y nuevas investigaciones acerca de la mejor forma de aprender. Pero esta revolución pedagógica no es algo que ahora “esté de moda”. Tal es el caso de la Institución Libre de Enseñanza, uno de los primeros proyectos pedagógicos que se desarrolló en Espala.

La Institución Libre de Enseñanza fue fundada en 1876 por un grupo de catedráticos entre los que destacan Francisco Giner de los Ríos, Gumersindo de Azcárate, o Nicolás Salmerón. Estos catedráticos defendían la libertad de cátedra alejando la enseñanza a cualquier dogma relacionado con temas religiosos, políticos o morales.

La ILE se convirtió en la vía por la que llegaban a España de las más avanzadas teorías pedagógicas y científicas extranjeras sacadas a la luz por medio del Boletín de la Institución Libre de Enseñanza donde llegaron a colaborar  Bertrand Russell, Henri Bergson, Charles Darwin, Santiago Ramón y Cajal, Miguel de Unamuno, María Montessori, León Tolstoi, H. G. Wells, Benito Pérez Galdós, Juan Ramón Jiménez, entre otros.

La ILE supuso una autentica revolución sobre todo en algunos aspectos que no se había ni pensado tocarlos de la educación tradicional como por ejemplo mezclar a alumnado de todas las edades y de distintos sexos (los colegios eran separados por aquel entonces). La mayoría de los ejercicios que se realizaban eran al aire libre y se buscaba crear interés y motivación en el alumnado del mundo que le rodeaba.

A raíz de la Institución Libre de Enseñanza se fundó la Residencia de estudiantes donde residieron grandes personajes de la historia de España como Luis Buñuel, Dalí, Julio Salinas, Federico García Lorca o Manuel de Falla.

Una de sus principales inquietudes era acabar con las desigualdades existentes entre los ciudadanos del campo y de la ciudad. Para ellos se crearon las Misiones Pedagógicas, las cuales comenzaron durante la Segunda República a recorrer todos los pequeños pueblos y aldeas llevando cultura, mostrándoles sus derechos y deberes como ciudadanos y además ayudando a los maestros con nuevas técnicas y metodologías a usar en aula.

Estas misiones pedagógicas precedida por la Institución Libre de Enseñanza fomentaba la cultura general por medio de bibliotecas populares, sesiones cinematográficas, orientación y ayuda pedagógica por los centros escolares y reparto de materiales que ayudara al profesorado.

Aún hoy día existen diversas instituciones educativas vinculadas a la Fundación Giner de los Ríos que continúan impartiendo, con ciertas variantes, el modelo pedagógico de la Institución Libre de Enseñanza.

Muchas personas han considerado la Institución Libre de Enseñanza como la propulsora de la generación del 27 donde salieron grandes poetas, escritores, músicos y artistas en general y como la antecesora de la más que conocida como revolución pedagógica en la que se buscan nuevos modelos de hacer escuela, de enseñanza y de aprendizaje, donde el alumnado deje de ver la escuela como una aburrida obligación y el método de enseñanza de clases magistrales sean un tema que ha quedado en el pasado.

Os dejo un pequeño vídeo donde se explica las distintas fases por las que fue avanzando la Institución Libre de Enseñanza contada por Giner de los Ríos.