Aunque no lo conocemos como una asignatura propiamente dicha, el diseño gráfico está presente a lo largo de todo el proceso educativo de los más pequeños, desde el momento en el que se les pide dibujar algo, por muy simple que sea. Se encubre mediante la asignatura de Educación Artística la cual es importante y beneficiosa para el desarrollo del niño.
Esta asignatura supone una forma de desconexión, en ella los más pequeños pueden desarrollar y dar rienda suelta a su imaginación, la cual no es poca. Poseen total libertad de expresión por lo que aumenta su interés e implicación en la realización de las actividades que se les pida.
Da lugar, a su vez, a un aumento de su creatividad y les ayuda a expresar emociones y sentimientos, si sabemos cómo interpretar estas pequeñas obras de arte podemos llegar al fondo del pensamiento e interior del alumnado, conociendo los detalles de su personalidad y logrando una mayor socialización del menor al mostrar abiertamente lo que siente.
Un ejemplo muy claro para fomentar la expresión artística en los más pequeños es realizar un concurso, como por ejemplo, de felicitaciones de Navidad, una actividad muy típica en los centros escolares, donde se anima a participar a todo el alumnado de cierto curso (en este caso se recomienda que el concurso esté destinado a alumnado de la misma edad) quienes presentarán sus dibujos para someterse a una votación y escoger la mejor felicitación. Esta actividad es extrapolable a cualquier momento del año, adaptando la temática a la que creamos conveniente.
Por otro lado, existen otro tipo de actividades para salir de la rutina como salir al exterior a dibujar un elemento característico del pueblo o ciudad donde se encuentran o ir al medio rural a dibujar un paisaje, motivándoles así al hacer algo diferente y consiguiendo una mayor implicación por su parte, esforzándose en lograr un buen resultado.
Ten en cuenta que el dibujo no es la única posibilidad de expresión artística, pues las manualidades son otra actividad interesante para desarrollar la creatividad sin importar la edad, ya sea desde realizar un molino que permita el movimiento de sus aspas mediante un encuadernador, hasta realizar una maqueta de un edificio.
Fotografiar elementos de su entorno de una forma creativa puede ser otra interesante actividad a realizar por el alumnado donde podemos lograr resultados de lo más curiosos, una actividad que fomenta su creatividad, originalidad e imaginación.
En definitiva, el diseño o expresión gráfica está presente en nuestras vidas desde que comenzamos a aprender, siendo un elemento de gran importancia para nuestro desarrollo integral y nuestra libertad de expresión, así como el impulso máximo a la hora de desarrollar nuestra creatividad.
¡Feliz día Mundial del Diseño Gráfico!
